Girls: A medio camino de todo

Largo y tendido se ha venido hablando toda esta pasada semana de uno de los estrenos más esperados de esta Midseason: Girls. Creada, producida y protagonizada por Lena Dunham (Tiny Furniture) para HBO y bajo la protección e inestimable ayuda de Judd Apatow, Girls se ha postulado como una de las series más controvertidas del momento que ha deparado elogios y críticas casi a partes iguales. Una serie que difícilmente ha dejado a nadie indiferente.

HANNAH: UNA PROTAGONISTA ODIOSA

La pieza angular sobre la que parece va a girar la serie es Hannah: una chica de 24 años, que tras culminar la Universidad, es contratada de becaria en una empresa de arte gráfico, en la cual no ve "ni un duro". Anclada en una falsa estabilidad, es despertada de su letargo cuando sus padres deciden "cerrarle el grifo". Lo demás visto en el piloto y el segundo capítulo no resulta muy alentador. Hannah se ha acomodado en una vida en la que más y más es necesario luchar contra viento y marea para conseguir siquiera un trabajo algo decente.

Mi primera impresión respecto a ella no resultó la mejor de las posibles. Bajo la piel de esa chica llena de tatuajes de ilustraciones de cuentos para niños, parece encontrarse una chica egoísta, infantil, inmadura que no duda en suplicarle a sus padres una manutención por 2 años de nada más y nada menos que de 1100 $ mensuales. "Bonita, yo también querría que me dieran ese dinero mis padres, pero entiendo perfectamente que si quisiera vivir en NY por mi cuenta y encima en una zona acomodada, tendría que ponerme a trabajar..." El problema es que Hannah no quiere hacer nada de eso. Quiere ser una artista y poder escribir unas "memoirs" de las cuales apenas lleva escritas unas pocas páginas. Para poder terminarlas, primero tiene que vivir, para poder tener algo sobre lo que escribir. ¿Y yo me pregunto? ¿Acaso tiene algo interesante que contar no sólo en las memoirs sino a nosotros, los espectadores? No consigo ver más allá del patetismo desprendido en el primer capítulo en el cual roba las propinas dejadas por sus padres al personal de la limpieza del hotel y/o de la incomodísima, bochornosa escena en la cual es prácticamente vejada por un tío, que también vaya tela... Menudo espécimen. 

LA CRUDA REALIDAD DEL MOMENTO. "LA VOZ DE UNA GENERACIÓN"

Grandes dosis de realismo y concordancia con la actualidad, en torno al argumento y la problemática planteada serían algunas de las virtudes que deberíamos ensalzar de Girls. En la serie quedan realmente bien ejemplificados algunos de los grandes problemas actuales: El paro juvenil, la falta de oportunidades a los jóvenes y por tanto, de obtener experiencia, y/o la casi imposibilidad en muchas ocasiones no sólo de conseguir un trabajo digno, sino de uno relacionado con lo que has estudiado o querías llegar a ser, a no ser que quieras trabajar gratis... Muchos son los jóvenes que vemos como aquellas promesas que se nos hacían de pequeños de: "Tu futuro depende sólo de ti mismo y tu esfuerzo" no resultan tan ciertas como se pensaba. Quizás Hannah y su círculo de amigas no es el mejor grupo para abordar el problema o eso pienso yo, pero no se le puede reprochar a Girls el intento de transmitir el sentimiento de una generación. Un sentimiento de indecisión, desubicación, desilusión y  desencanto, entre otros muchos calificativos.

LA SOMBRA DE NY Y SEX AND THE CITY

Las alusiones y comparaciones a Sex and the City en un plano más mundano se han hecho más que palpables. Una vez ya emitido el segundo capítulo, podemos confirmar que Girls no resulta tan similar y se trata de una serie más diferente de lo que se pensaba en un primer momento respecto a la de Carrie Bradhshaw y compañía. De todas maneras, la serie no elude las comparaciones y así lo muestra referenciandola en el primer capítulo por medio de un póster y a través de una de las compañeras de piso de Hannah: la inocente Shoshanna (Zosia Mamet), que se declara devota de la serie.  El resto del grupo lo conforman Jemina Kirke interpretando a Jessa, la amiga nómada y alternativa con inmensas ganas de disfrutar la vida y aprovechar cada momento, además de aprovecharse también de todo aquel que se mantenga cerca de ella. Y cerrando el grupo se encuentra Marnie (Alljison Williams). Es prácticamente la única amiga en el grupo a la que todo le va bien y todo le sonríe. Desgraciadamente, ella no pensara de la misma manera. Mandona y con complejo de madre,  no logra finiquitar una relación desde hace tiempo atrás, con un novio esplendoroso, pero que no logra congeniar con ella.

LA POLÉMICA: NY COSMOPOLITA

¿Que sería una serie novel sin sus dosis de polémica? Una de las cosas que se le echaron en cara a Lena Dunham fue que en el retrato de una NY moderna y cosmopolita no constase ninguna persona de color en el reparto. Solamente se encontró una persona de raza negra durante la emisión del piloto: un vagabundo. Desde Twitter ya ha dejado entrever que durante el resto de la temporada no cambiará mucho el panorama, pero que si se emite una segunda temporada intentarán solucionar ese problema.

¿ME LA QUEDO O NO?

Seguiré de cerca Girls en los próximos capítulos, pero seguramente me deshaga de ella. Soy incapaz de soportar a Hannah y seguir capítulo a capítulo unas historias que se presuponen demasiado irritantes y soporíferas. Se hace incómodo seguir Girls, una serie a medio camino de todo.  "Bienvenidos al mundo de la dramedia sin gracia." Para mí, de momento, es insuficiente.